Focus

Las ventanas estaban abiertas y el aire invernal barria la moqueta azul de pelusas y pelos del ultimo entrenamiento.Tengo que entrenar. Quiero ser mas fuerte, mas rapido. Quiero poder proteger a aquellos a los que quiero. Quiero poder defender mis ideales y mis principios si es cuestion de justicia y honor, de vida o muerte. Quiero ser mas fuerte.Tengo que entrenar.

Cuando entrenas, no solo entrenas el cuerpo, sino la mente. Estaba en silencio, escuchando unicamente la voz de mis pensamientos. Sentia como se llenaba mi cuerpo del aire calido de la sala y el olor a sudor de mi propio kimono. Estaba en paz conmigo mismo, e intentaba centrarme. Trataba de dejar fluir la energia de mi corazon, mi voluntad, hacia cada centimetro de mis extremidades, pero no podia. Juzgando con cada movimiento, juzgando si dejar al enemigo invisible con vida. Gire la cadera y golpe con el puño el espacio vacio frente a mi, exhalando fuertemente. Kia! La sala estaba vacia. Solo yo y mi espiritu. Pero mi espiritu no estaba tranquilo. No estaba centrado. 'En que piensas?' En el mundo exterior. Mi mente no estaba donde tenia que estar. Intente pensar en mi cuerpo.Me ardian los musculos y la mente la tenia nublada. No queria pensar pero mi corazon y mi estomago no dejaban de recordarmelo. No dejaba de latir y mi estomago no queria mas que vomitar. Vomitar algo dentro de mi que no estaba en paz conmigo. Como si fuera un marionetista que controla mis moviminetos. Mi corazon y mi mente, sedados por la incapacidad. Mi mente era como un viejo que grita desde el porche a su nieto que esta en la cocina que le traiga un vaso de agua, y le trae otra cosa distinta. Mi cuerpo no parecia oir los mensajes completamente y no se movia como yo queria.

Me volvi al fondo de la habitacion y me sente de rodillas con las manos entrelazadas. Oia la rumba que habia en el interior de mi pecho y trataba de calmarlo. Pensaba en una luz blanca, pero lo unico que habia era un negro aterrador, con rostros semiperfilados que aparecian a cada instante. Los enemigos invisibles ya tenian rostro, y me daban mas miedo de lo que creia. Aprete los puños y trate de toser, con esperanzas de que saliera algo. Un hombrecillo verde, un marionetista, tu almuerzo, tu corazon, una lagrima...algo. Pero no salia nada. Solo un gesto ridiculo en el que ni siquiera salia aire. Solo se me cerro la garganta esperando a que tragara saliva y sintiera como me recorria el cuerpo hasta el interior de mi pecho. Escuche el silbido de mi nariz hiperventilando. '¡Esto es ridiculo!' Me levante con los ojos cerrados y me situe en medio de la sala.

'Abrelos!' parecia susurrar el viento que entraba por las ventanas. En la sala, habia cien nuevos enemigos imaginarios, todos con el mismo rostro. Me movia, tratando de esquivar cada ataque y propiciarles un golpe que les devolviera a mi subconsciente. Me pesaban los pies. Me quemaban los muslos y los gemelos. Me seguia moviendo arrastrando los pies contra la moqueta, dando saltos cada vez mas cortos, haciendo movimientos cada vez mas cerrados. No podia mantener la guardia de los brazos arriba. Intentaba explotar los ultimos resquicios de energia que me quedaban y trataba de lanzar mis piernas al aire buscando el rostro del enemigo. El pie atraveso el rostro y perdi el equilibrio. Perdi el equilibrio pero el rostro me seguia hasta caer bocaabajo, sin respiracion. Cerre los ojos, y seguia alli. Un escalofrio me recorrio la espalda, los abri a la vez que la boca y desaparecio. La moqueta estaba empapada de mi almuerzo redigerido, pero el rostro ya no estaba. Mi corazon se tranquiliza, pero lo unico que piensas es: 'Quiero ser mas fuerte'
Porque por mucho que entrenes, tu cuerpo, es tu coraza, la mente la que lo dirige, pero el corazon....El corazon es la fuente de tu poder, pero es lo mas fragil que puede haber.