Paralized

JACK! Estoy paralizado, tio. No se que hacer. Estoy en un campo abierto plagado de personas. Algunos se mueven entre otros que estan petrificados, igual que yo. Pero se muevan o no, todos quieren el control sobre sus vidas. Estan deseando hacer lo que quieren, y tomar las riendas de su vida. Se que yo tengo las riendas muy bien cogidas y enroscadas a mis muñecas. Yo no quiero eso, Jack. Por que en realildad todo el mundo la tiene. Solo que estamos tan metidos en nuestras cabezas que no lo vemos. Cojones! Estoy paralizado, porque no se donde para donde coño moverme. No se si quiera donde mirar. Donde voy? En que direccion deberia caminar? Ni siquiera se si deberia caminar? Hasta ahora he corrido, he volado, he saltado y buceado. Pero ahora solo estoy quieto. Sin mas. El viento me sopla fuerte y frio. Y me encuentro en lo alto de un puto barranco, en el extremo del campo, donde mis ojos se fijan en el enorme vacio que tengo de frente que esta a menos de un paso de mi. Jack! Dime algo! Siempre he seguido tu consejo. No me falles ahora!

Jack caminaba con los vaqueros apretados por la calle principal. Detras de sus gafas sin lentes, miraba los conjuntos de los maniquis. Su chaqueta negra volaba con el viento que le venia de frente. Seguia con su paso apretado, desviando su mirada de vez en cuando para contemplar las bien formadas nalgas de alguna chica que pasara a su lado. Su cartera habia engordado en los ultimos meses y ahora no cabia en su bolsillo trasero. Ahora debia llevarlo en su maletin de cuero, con los papeles, con el sello de la coorporacion para el que trabajaba. Su maletin le pesaba, pero se habia acostumbrado, con los años. Jack, siguió andando, sin mirar por donde iba. Sin mirar a nadie. Sin mirar por nadie. Jack siguio andando por el paso de zebra. Imaginando como le quedaria la ropa que acababa de ver en los escaparates. Imaginandose como un maniqui mas. Moldeado a la imagen de la sociedad. Jack, se imaginaba, mientras cruzaba. Y no vio el mini cooper, que sello los femures de Jack con el parachoques. El crugido de los huesos de las piernas de Jack le acompaño por el aire hasta que se incrustó contra el escaparate perpendicular a la calle. Alli yacia Jack. Un maniqui mas, teñido de rojo.