Hubo una vez en que cada noche un beso de buenas noches. Y a mi lado se oia un susurro: abrazame fuerte. amis brazos la rodeaban y me sumia en sueño profundo. En aquella epoca me atormentaban las pesadillas de mi futuro incierto. Pensaba que era mi yo del futuro avisandome. Avisandome de que decia yo. Y como ub estupido no se lo guarde en secreto. Solo los ninos tienen pesadillas. Yo ya no soy un nino. A veces mis suenos me llevaban a fantasias de paraiso, pero en mitadde la pelicula descubria que todo era demasiado bueno para ser verdad.
Recuerdo una noche que me veia a ni mismo al lado de aquella chica que me mandaba con un beso tan dulce hacia mis pesadillas. Me veia desde fuera, como una tercera persona. Empece a hundir las manos en mi pecho atravesando la piel con mis uñas sintiendo como apartaba carne y venas tensas mientras luchaba contra el fantasma de mi mismo. Mi yo sobre mi clavaba las.unas en mis costillas y empezaba a abrir las costillas como quien rompe alitas de pollo. Y desde mi cama luchaba por quitar de encima aese impostor que queria apoderarse de mi cuerpo y miraba con deseo a la chica que dormia placidamnte a mi lado.
En el momento que sus manos se envolvian sobre mi corazon y mis pulmones dejaban de hincharse conseguia a encerrar mis manos sobre su cuello. Pero antes de que pueda hacer nada al respecto me despertaba entre sudor y lagrimas. Confuso sobre quien era.
Con el tiempo llegue a pensar que no era mi futuro yo tratando de decirme algo, sino yo mismo de ese presente. El yo tras la fachada de tipo duro. Supongo que no descubri nada nuevo, ya lo decia Freud.
Muchas veces, no queria abrir los ojos por temor a encontrarmelo alli, sobre mi, levitando como un buitre carroñero esperando a devorar sus presas.
Recuerdo la mirada de aquella chica, pacifica y tan perpleja de verme asi.
La chica del pelo en el ombligo. Si, aun recuerdo con ternura y una sonrisa ese detalle. Mirando atras me sorprende que algo asi no me diera cierto asco de algun tipo por lo banal que era en aquel entonces. Recuerdo que era un solo pelo negro hundido en el crater del ombligo de su vientre plano.
Supongo que son los pequeños detalles los que recuerdo...
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